Una receta simple, de las que una desea no olvidar jamás y que, si se hacen una vez, se recuerdan toda la vida.
Ingredientes:
5 berenjenas cortadas en láminas gruesas, se les ha puesto sal encima y ya están escurridas.
Salsa Blanca, harina retostada en mantequilla, a la que se le añade leche hasta espesar, más (sorpresita) una gota de esencia de vainilla.
8 tomates sin piel ni semillas, en cubitos
Perejil picado
Sal y pimienta
Aceite de oliva
Queso rallado cantidad necesaria
Opcional: 200 g de jamón en lonjas
Cómo preparar:
Precalentar el horno a medio. Aceitar na fuente para horno. Sofreír un par de dientes de ajo en aceite de oliva y añadir el tomate hasta obtener una pasta o sugo, si se desea más líquido añadir agua. Salpimentar. Freír las berenjenas en poco aceite y empear a armar la lasagna: Salsa Blanca, berenjenas, salsa roja, jamón, queso, salsa blanca, berenjenas, etc. Espolvorear con el perejil y hornear hasta que el queso se derrita. Servir con vino tinto.
Esta lasagna no tiene pasta de lasagna!, y si se rebozan las berenjenas en huevo y harina se obtiene una especie de pizza sin masa que queda muy bien igual.
Ingredientes:
5 berenjenas cortadas en láminas gruesas, se les ha puesto sal encima y ya están escurridas.
Salsa Blanca, harina retostada en mantequilla, a la que se le añade leche hasta espesar, más (sorpresita) una gota de esencia de vainilla.
8 tomates sin piel ni semillas, en cubitos
Perejil picado
Sal y pimienta
Aceite de oliva
Queso rallado cantidad necesaria
Opcional: 200 g de jamón en lonjas
Cómo preparar:
Precalentar el horno a medio. Aceitar na fuente para horno. Sofreír un par de dientes de ajo en aceite de oliva y añadir el tomate hasta obtener una pasta o sugo, si se desea más líquido añadir agua. Salpimentar. Freír las berenjenas en poco aceite y empear a armar la lasagna: Salsa Blanca, berenjenas, salsa roja, jamón, queso, salsa blanca, berenjenas, etc. Espolvorear con el perejil y hornear hasta que el queso se derrita. Servir con vino tinto.
Esta lasagna no tiene pasta de lasagna!, y si se rebozan las berenjenas en huevo y harina se obtiene una especie de pizza sin masa que queda muy bien igual.